12 mar 2014


Tengo una pluma de pavo real en el centro,
cuando se enciende la pluma dentro mío,
todo lo que se le oponga desaparece...
desapareciste. Me perdiste,
Soy alguien que se achica en tus sueños
saludándote fuera del tren.

Ahora es transición.

Cuan fuertes somos cuando lo obvio concluye
a lo irrebatible que es el silencio.

Sólo gotean las esperanzas,
gota por gota,
en una cueva oscura.

Cuán fuertes seremos...

El brillo del oro sigue estando en vida
los hilos transparentes de que te hablé
corren solos por la noche
sordos, a cualquier consejo
vente al olvido
camina conmigo.

El viento mece el corazón
y el sol lo ama.
Naciste.
Naciste con saliva de neón
mientras tu corazón carga
tus escapes de una pieza ajena.